viernes, 13 de diciembre de 2013

Calafate

Las cosas de la vida, no es que nunca fuese a ver el Perito Moreno, sino que lo he visto por partida doble!
Dicen que quien come calafate (una mora silvestre que nace aquí mismo), vuelve. Yo comí helado de calafate y !he vuelto con un heladero!
Tenía mucha ilusión por venir y ver la reacción de Diego. Porque a mí me encantó y podría ser que nunca había visto la nieve por lo que me sorprendió tanto, pero ver la cara de felicidad de Diego frente a la pared de hielo no tiene precio.
El hostal Marco Polo Suites esta "tan" solo a 112 escalones de la calle principal del pueblo que no ha cambiado mucho desde mi última visita. Aunque hemos venido en diciembre y supuestamente las temperaturas deberían ser mas agradables, hacía un frío de muerte. Capa sobre capa de ropa parecíamos dos muñequitos michelín.
Lo único que no hemos podido resistirnos es a comprar un par de guantes que se quedarán en la mochila hasta Japón en febrero! pero merecía la pena.
Tenemos los días contados para reservar las excursiones que queremos hacer y no perdernos nada.
 Fuimos por la navegación Todo glaciares, donde te llevan por el lago argentino de agua azul verdosa por el deshielo y los sedimentos que arrastra en el camino.

Son 7 horas en total, al mas puro estilo ryanair nada mas entrar te intentan vender una sala vip en la que pasar la travesía junto con el capitán, el bar y los fotógrafos oficiales. Respecto a lo primero, en cuanto lo anuncian te ves a todos los pijitos levantándose para ir a la sala vip.
Después anuncian el servicio de bebidas y snacks del bar, y otra marea de gente se levanta. Por ultimo los fotógrafos...nadie va allí hasta que empiezan a aparecer los glaciares, las mujeres enloquecen por hacerse la foto "profesional" y se ponen en cola como poseídas con el dinero en la mano.
Nosotros, hicimos uso del bar que con tanto hielo y frío ahí fuera un poco de café de vez en cuando no venía mal.
Las primeras horas son de ilusión, ilusión porque no sabes en que momento aparecerá el glaciar. Como si derrepente surgiera delante tuya en plan titanic, por suerte los bloques de hielo que nos íbamos encontrando eran gigantescos y nuestro capitán los rodeaba fácilmente.
Nuestras caras de sueño dentro del catamarán

Una fiesta de colores, con tonalidades de azul y blanco dependiendo de la concentración de partículas de agua y en algunos casos icebergs negros por la tierra que han ido arrastrando cuando estaban en la morrena del glaciar.
Daba bastante impresión pensar que lo que ves encima del agua es solo una novena parte del total. Seguimos adelante y llegamos a brazo del glaciar Upsala.


No se podía pasar por la concentración de icebergs en la boca del brazo que llevaría al frente del glaciar. De echo dicen que todos los pedazos de hielo que hemos visto en el camino provienen de ese glaciar. Ademas Tiene la particularidad de que el frente del glaciar no toca el fondo cuando se encuentra con el lago porque es muy profundo, por lo que una vez cada X años cae todo a la vez.

Dos km de hielo rompiéndose y desprendiéndose a la vez, lamentablemente no ocurrió en los escasos 20 min que estuvimos ahí :)
Un poco mas tarde se llega al Spegazzini, impresionante. Una lengua de hielo bajando por la montaña para encontrarse con el lago.


Después de eso, otras dos horitas de navegación que aprovechamos básicamente para dormir y no solo nosotros, todo el barco. No se escuchaba ni un alma!
El tipo del megáfono nos despertó recordando que podíamos hacernos la foto con los fotógrafos oficiales por si aun no lo habíamos valorado.
Salimos fuera a dar la cara para encontrarnos con esa maravilla de la naturaleza. El perito moreno delante de nosotros, una masa de hielo de 60 metros de altura y 5 km de largo. Es la celebrity del parque nacional aunque no el mas grande. Su avance lo hace chocar con tierra firme en el punto intermedio, creando una presa natural y un desnivel de agua con respecto al lago de hasta 30 metros.
Por la presión se crean filtraciones y finalmente un túnel de hasta 50 metros que cuando se derrumba es un espectáculo sin igual. Justamente ahora se ha creado la presa de nuevo así que en no mucho tiempo volverá a caer.
Mientras tanto nosotros vimos unos cuantos derrumbes pequeños en la parte frontal del glaciar y escuchamos muchos mas. El glaciar perito moreno ruge como ninguno.


Volvimos al pueblo buscando el calor de un buen asado o algo parecido que llevarnos a la boca. Topamos con un restaurante a la medida de nuestro bolsillo, yo me pedí un menú "mochilero" que consistía en un guiso de cordero, bebida y postre. Diego fue como siempre a por su lomo argentino.
No sé que decir, me gustan los guisos pero este le ha hecho la competencia en mi ranking personal de guisos.

Al día siguiente fuimos en el autobús publico a las pasarelas del Perito Moreno. Una vez mas hice de guía turística para explicarles a unos turistas ingleses que podían hacer una mini excursión en barco por la cara oeste del glaciar.
Nosotros que ya estábamos saturados de barco del día anterior nos fuimos directos a recorrer las pasarelas.
Parece pequeño el barco...


Los colores del hielo

El fotógrafo concentrado

!Otra vez aquí!

Nuestra ultima noche fuimos a Viva la Pepa, súper postre para un súper día.

Volvimos a Buenos Aires, otra vez a casa de Cecilia y chucky que a estas alturas tendrían que estar tirándose de los pelos por aguantarnos :)
Han sido nuestro pequeño refugio en argentina para movernos de un lado a otro, organizar nuestra agenda y aprovechar al máximo nuestros días aquí.
Entre La Plata y Calafate pasamos dos noches en su casa para celebrar el cumpleaños de Chuky, cumplía 30 y prometía.
Prometía y no defraudó, lo pasamos genial y hasta cantamos karaoke, creo que después de esa noche los vecinos no van a serles muy amigables.
Mención de honor al lechón asado que trajeron sus padres de Saladillo (que es su pueblo, no ese barrio de Algeciras que todos estais pensando).
También tengo que destacar la torta de milhojas rellena de dulce de leche y el browny y tantas cosas buenas que se me está haciendo la boca agua de rememorarlo.

Gracias a nuestros amigos por hospedarnos tantos días por tratarnos tan bien que casi no nos queremos ir. !Os esperamos en España siempre!
Pd. Traed a Lucky!

Rumbo a Easter Island...

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